sábado, 19 de enero de 2008

Bienvenido

Bienvenido a la noche,
tú que conociste del mundo
la belleza y sus vicios.
Infame criatura sedienta
de bondad y martirio.
Bienvenido, ese es tu espejo....
El bien y el mal dentro de ti,
similares cantidades, quizá...
¿Te atreverás a juzgarte?
Elige al Dios que lo hará por ti.
Bienvenido a los infiernos del cielo.
El mundo te olvida,
pobre hombre arrobado de deseo.
Y tiemblas, desperdiciaste tu vida.
La eternidad, tú metáfora favorita.
Bienvenido a la noche,
tus muertos te esperan.
Sí, incluso ella.

2 comentarios:

Salvador dijo...

Uno puede atreverse a todo, debe atreverse a intentar cualquier cosa. Y bienvenida la negrura de la noche, no hay por que temer; pero antes he de sacarme los ojos, pues no vasta cerrarlos, soy demasiado débil, se que caería en la tentación.

Salvador dijo...

Uno puede atreverse a todo, debe atreverse a intentar cualquier cosa. Y bienvenida la negrura de la noche, no hay por que temer; pero antes he de sacarme los ojos, pues no vasta cerrarlos, soy demasiado débil, se que caería en la tentación.